CONFORMIDAD (154)
Quizá fue por vagancia, por torpeza tal vez,
o por otros motivos que no quiero mover,
-la verdadera causa ¿quién la puede saber?-,
no he llegado en la vida donde ha llegado usted.
Pero he sido dichoso cuanto se puede ser,
y al andar mis senderos, para apagar mi sed,
he bebido mi vino sin mezclarlo con hiel,
en paz conmigo mismo, con mi Hermano y con EL.
El dinero no ha sido, ni tampoco el poder,
las causas eficientes bastantes a mover
mis impulsos vitales para llegar a ser
un hombre acaudalado, o Senador, tal vez.
Confieso mi vagancia y mi desinterés
en llegar a cacique, además de que sé
que todo el que se empina siempre muestra el revés,
y nunca ha sido un cuadro que resulte tan bien
como para enseñarlo a quien lo quiera ver.
Yo prefiero los libros que tengo en mi anaquel,
un vaso de buen vino, añejo a poder ser,
y ver pasar los días dedicado a leer
aquello que me gusta y me causa placer;
y alternar mis lecturas, dando al atardecer
un hermoso paseo, despacito y a pie,
por el campo adelante, y sentarme también
a mirar el paisaje y el suave rosicler
de las nubes que pasan y nos muestran su envés.
Quizá fue por vagancia, por torpeza tal vez,
quizá..., cualquiera sabe por lo que pudo ser,
he llegado tan sólo a este humilde escabel
que me sirve de asiento, y que le ofrezco a usted
por si quiere sentarse a mi lado a beber,
en paz entre nosotros, y en paz también con EL,
un vaso de buen vino que apague nuestra sed,
mientras vemos el mundo y las nubes correr,
sin envidiar de nadie su ciencia y oropel.
(Ya sabe dónde tiene un amigo muy fiel,
de no mucha importancia ni de mucho valer,
que vive muy conforme con ser tal como es,
y que le ofrece asiento y saluda cortés.)
José María Hercilla Trilla
www.hercilla.blogspot.com
Avila, 14 Septiembre 1986
(De mi Libro: "Canciones de mis años idos")
viernes, 31 de octubre de 2008
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