LA DUDA RAZONABLE (219)
Por mucho que presumas y te jactes,
-seriamente, o bien a la ligera-,
de tu falta de fe y agnosticismo,
un día llegará, aunque no quieras,
en que habrás de dudar de todo cuanto
negaste anteriormente con firmeza.
Y es que el tiempo, que todo lo quebranta
con su paso, te quebrará la fuerza
y te abrirá los ojos que tuviste
cegados por tu orgullo y tu soberbia,
y empezarás a comprender, Hermano,
que somos una cosa tan pequeña,
que es mejor una duda razonable,
nacida de humildad y de prudencia,
que obstinarse en negar rotundamente
aquello que no cabe en tu cabeza.
Un día llegará, mal que te pese,
que descubras de pronto tu ceguera
y empieces a dudar..., como dudamos
los hombres razonables en la tierra.
José María Hercilla Trilla
www.hercilla.blogspot.com
Barco de Avila, 14 Abril 1990
martes, 7 de octubre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario